
El Zoo Alpino de Innsbruck alberga muchas especies de animales alpinos que de otro modo no serían tan fáciles de ver. Linces, gatos monteses, buitres, osos... ¡hay tanto que ver! El zoo de los Alpes está abierto todo el año. Una visita en primavera es un momento especial, ya que es cuando nacen las primeras crías y otros animales despiertan de la hibernación. Una gran oportunidad para explorar el zoo alpino con niños. Por cierto, la mayor parte del zoo es apta incluso para cochecitos de niños.
Entre osos y parque infantil
Al principio, se pasa por el recinto de los osos, donde se puede ver comer a los impresionantes osos. Justo detrás, encontrará un gran parque de aventuras que no deja nada que desear. El camino pasa junto a águilas, íbices, lobos, alces, murciélagos, reptiles y muchos otros animales. Encontrará una descripción detallada de cada habitante in situ. El zoo alpino alberga unas 150 especies animales y 2.000 animales. También hay una gran granja en el zoo, donde no sólo podrá explorar los animales del lugar, sino también darles de comer y acariciarlos. Atención, por favor, visite sólo a los animales etiquetados, a los demás es mejor dejarlos tranquilos.
En la cima del Zoo Alpino
En la cima encontrará un sendero en forma de caracol que termina con una impresionante vista de Innsbruck. Unos relajantes columpios invitan a quedarse aquí. También hay un tobogán con elementos de escalada para los niños.
Las crías llegan en primavera
Cada año, varios animales del zoo dan a luz. La mayoría de las crías nacen entre abril y junio. Ya hemos descubierto las primeras crías. Es un placer ver a estas preciosas crías de jabalí.
Con el cochecito por el zoo alpino
El camino que atraviesa el zoo alpino está en su mayor parte libre de barreras, asfaltado y es fácilmente accesible con un cochecito. El zoo está situado en una pendiente, por lo que en algunos tramos es empinado. También hay varias estaciones de descubrimiento de animales a lo largo del recorrido por los recintos de los animales. Por ejemplo, puede palpar objetos de animales o medirse con la envergadura de un águila. El recorrido completo dura entre 2 y 3 horas. Hay muchos lugares para sentarse y tomar un tentempié por toda la zona. Sin embargo, gran parte de la visita se realiza al aire libre, así que llévese protección contra la lluvia si el tiempo es incierto
Cómo llegar al zoo de los Alpes
Se puede llegar al zoo de los Alpes en transporte público, coche o a pie. Delante del zoo hay un gran aparcamiento de pago. Si viaja en transporte público, coja el Hungerburgbahn o la línea W de autobús.
Espero que se diviertan tanto como nosotros en el zoo de los Alpes. Especialmente con niños, una visita al zoo es siempre un momento estelar, hay tanto que ver y los niños hacen automáticamente mucho ejercicio paseando por el recinto. También pueden desahogarse en el parque infantil. Recomiendo el zoo alpino como excursión para toda la familia.
Enlaces útiles:
Transporte público de Innsbruck
Más historias del zoo de los Alpes
Si quieres saber más sobre el Zoo de los Alpes, puedes leer estas historias del blog. Más sobre crías de animales, abejas y mucho más.
El zoo de los Alpes: una experiencia
Las abejas andan sueltas por el zoo de los Alpes
Animales y plantas a 2.000 metros
Una mantis religiosa en el zoo de los Alpes
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Lo que más le gusta es hacer senderismo por las montañas de Tirol en compañía de su perra Marley y su cámara.
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